La educación en positivo se basa básicamente en enseñar al perro con refuerzos positivos. Si un perro realiza un comportamiento e inmediatamente se le refuerza, premiándolo, hay muchas posibilidades de que el perro repita ese comportamiento.
Podemos pedir un comportamiento al perro y premiarlo por realizarlo o incluso podemos premiar un comportamiento natural del perro para que lo vuelva a repetir. Lo importante es premiar en el momento adecuado, ni antes, ni después, para que el perro entienda porqué le estamos premiando.
De esta manera podemos conseguir que repita ciertas conductas o eliminar otras conductas indeseadas.
Volveré a hablar de las terapias incluidas en la educación en positivo y de los refuerzos con los que podemos enseñar a nuestro mejor amigo. Así como de las señales de calma, fundamentales, para poder comunicarnos con ellos.
domingo, 25 de abril de 2010
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